Este es nuestro primer manifiesto que repartiremos el 21 y 22 de Abril
MANIFIESTO Grupo Estudiantil de Reflexión GER
Acto I Sábanas
La negación de una posición política por medio de la Institución del Silencio, hace necesaria la creación de un lenguaje nuevo que busque los gritos que quedan detrás de la mudez. Pero, ¿qué sucede cuando no hay gritos porque el miedo ya ha borrado la conciencia? Es necesario realizar un diagnóstico sobre esta inconsciencia.
Es por esta razón que nosotros, el Grupo GER, nos hemos constituido para criticar, transformar y reflexionar sobre este entorno violento que no acepta su violencia, sobre un Derecho que se manifiesta por medio de un juego de poderes enmascarado de neutralidad, sobre un ámbito académico que olvida la sangre que se riega en nuestro país y enseña este olvido, buscando las palabras que se esconden detrás de la enseñanza: lo que no es dicho.
Mediante las sabanas queremos que los estudiantes realicemos un auto-diagnostico de lo que hemos manifestado, observando qué es lo que realmente nos importa y tiene trascendencia en nuestra vida como alumnos acostumbrados a olvidar, o resistentes a ello.
Nosotros nos resistimos a olvidar, y nos resistimos también a que se olvide la violencia del Derecho y del país en nuestras aulas.
Somos GER
Andrés López Morales
Ana María Mondragón
Ana Cristina Henao
Carolina Moreno López
Camila Mariño Venegas
Daniel Alejandro López Morales
Helena Catalina Rivera Cediel
Juan Rodrigo Villamil
Julián Daniel González
Luis Fernando Páez Díaz
Lucas Arboleda Henao
María Cristina Hernández Hurtado
domingo, 20 de abril de 2008
miércoles, 9 de abril de 2008
...GRAN EVENTO...
Hoy todos vimos materializado un pequeño sueño..una forma de que nuestro empoderamiento se vaya más alla de las palabras y pase a los actos....
Gracias por hacer que esto sea un acto colectivo, que al querer describirlo, solo venga a mi una palabra; lo hermoso porque no tengo más palabras y en tan poco tiempo nos hemos unido en torno a esa verdad que tanto buscamos... esa verdad se vio hoy... NO MAS MIEDO... no queremos vivir con miedo... queremos la REVOLUCIÓN, (aunque unos crean que no)...pero si vemos más al fondo queremos el cambio porque nos mamamos de que la gente no se cuentione, no se pregunte y asi siga por el camino de la importaculada... SÍ es cierto... nuestro Acto no hizo que el mundo cambiara... pero con que nosotros empecemos a cambiar y este discurso permee todo nuestro mundo ...así, empezamos a hacer cosas... Somos muy capaces de existir sin ser parásitos de nadie ni nada... porque el profeta esta en nosotros y en el otro.... queriendo así actuar y llevar juntas nuestras voces asi esten en contravía...............
Gracias por hacer que esto sea un acto colectivo, que al querer describirlo, solo venga a mi una palabra; lo hermoso porque no tengo más palabras y en tan poco tiempo nos hemos unido en torno a esa verdad que tanto buscamos... esa verdad se vio hoy... NO MAS MIEDO... no queremos vivir con miedo... queremos la REVOLUCIÓN, (aunque unos crean que no)...pero si vemos más al fondo queremos el cambio porque nos mamamos de que la gente no se cuentione, no se pregunte y asi siga por el camino de la importaculada... SÍ es cierto... nuestro Acto no hizo que el mundo cambiara... pero con que nosotros empecemos a cambiar y este discurso permee todo nuestro mundo ...así, empezamos a hacer cosas... Somos muy capaces de existir sin ser parásitos de nadie ni nada... porque el profeta esta en nosotros y en el otro.... queriendo así actuar y llevar juntas nuestras voces asi esten en contravía...............
Caro
martes, 8 de abril de 2008
ACTOS DE MEMORIA
9 DE ABRIL DE 2008
GAITÁN EN CONTRAVÍA
GAITÁN EN CONTRAVÍA
Desde 1948 hasta hoy seguimos en contra del olvido de la violencia
“Ninguna colectividad en el mundo ha dado una demostración superior a la presente. Pero si esta manifestación sucede, es porque hay algo grave, y no por triviales razones. Hay un partido de orden capaz de realizar este acto para evitar que la sangre siga derramándose y para que las leyes se cumplan, porque ellas son la expresión de la conciencia general. No me he engañado cuando he dicho que creo en la conciencia del pueblo, porque ese concepto ha sido ratificado ampliamente en esta demostración, donde los vítores y los aplausos desaparecen para que solo se escuche el rumor emocionado de los millares de banderas negras, que aquí se han traído para recordar a nuestros hombres villanamente asesinados”
“Oración por la paz”. 7 de Febrero de 1948. Jorge Eliécer Gaitán
CÓMO IDENTIFICAR UN BILLETE FALSO
Un país que falseó a Gaitán
PARQUE DE LA 93: LA TIERRA DEL OLVIDO
Un lugar dedicado a olvidar tiene que ser nombrado de nuevo
Descripción del acto:
Desde las 7 p.m., un grupo de personas saldremos en contravía por la carrera once desde la calle 82 hasta la calle 93 con antorchas y banderas memorando la Marcha del Silencio de 1948. Llevaremos una pancarta que le indicará al público la forma de identificar un billete de mil pesos falso. Repartiremos papeles con las mismas indicaciones. Buscaremos el Parque de la 93 para al final plantar allí una bandera que le dará su nuevo nombre: La Tierra del Olvido.
POEMA COMPLETO!!!
Os alimenta el aire sangriento de un juzgado,de un presidio siniestro de abogados y jueces.Y concedéis, los pedos por audiencia de un lado,mientras del otro lado jodéis, meáis a veces.Retretes de elegancia, cagan correctamente:hijos de puta ansiosos de politiquerías,publicidad y bombo, se corrigen la frentey preparan el gesto de las fotografías.Temblad, hijos de puta, por vuestra puta suerte,que unos soldados de alma patética deciden:ellos son los que tratan la verdadera muerte,ellos la verdadera, la ruda vida piden.Putonas de importancia, miden bien la sonrisacon la categoría que quien las trata encierra: políticas jetudas, desgastan la camisa jodiendo mientras hablan del drama de la guerra.Venís de la Edad Media donde no habéis nacido porque no sois del tiempo presente ni el ausente.Os mata una verdad en el caduco nido:la que impone la vida del siempre adolescente.Sois mis enemiguitos: los del mundo que siento rodar sobre mi pecho más claro cada día.Y con un soplo sólo de mi caliente aliento,con este sólo soplo dicté vuestra agonía.Hemos de destrozaros en vuestras legaciones,en vuestros escenarios, en vuestras diplomacias.Con ametralladoras cálidas y cancionesos ametrallaremos, prehistóricas desgracias.Porque, sabed: llevamos mucha verdad metida dentro del corazón, sangrando por la boca y os vencerá la férrea juventud de la vida,pues para tanta fuerza tanta maldad es poca.
Versos extraídos de la obra poética de Miguel Hernandez.
Versos extraídos de la obra poética de Miguel Hernandez.
jueves, 20 de marzo de 2008
¿Cómo entender la complejidad de la muerte? Son los malditos -¿o benditos?- recuerdos los que nos hacen odiarla. De no ser por estos no estaríamos pensando en lo que fue y ya no es, y no estaríamos llorando por lo que hubiera sido y ya no será. Aunque muchas veces, con los muertos en la tumba, nosotros nos encargamos de que en nuestros oídos no retumben nunca más las palabras de nuestros difuntos, y por medio de una ficción nos convencemos de que nuestra vida sigue y que, por ende, a los muertos toca dejarlos ir.
Aún así, negar que el sonido de las voces de quienes partieron al país de nunca jamás aún hace eco en nuestro ser, es engañarnos a nosotros mismos. Debemos estar dispuestos a recordar, es más, hemos de poner nuestros mayores esfuerzos en ello. De no hacerlo, nos perderemos de una de las más preciadas facultades que tiene el ser humano por esencia: recordar(la otra es soñar). Además, el olvido es una enfermedad que sólo nos lleva a ejecutar errores ya cometidos.
No podemos permitir que la muerte se robe nuestros recuerdos, y mucho menos nuestros sueños. Así, dispuestos a recordar, permitámonos seguir soñando. No dejemos que esta muerte acabe con lo que hemos construido, sino que, por el contrario, esforcémonos por lograr que a nuestros sueños – ¡vaya trillada, pero hermosa palabra!- no los mate ni la propia muerte.
Aún así, negar que el sonido de las voces de quienes partieron al país de nunca jamás aún hace eco en nuestro ser, es engañarnos a nosotros mismos. Debemos estar dispuestos a recordar, es más, hemos de poner nuestros mayores esfuerzos en ello. De no hacerlo, nos perderemos de una de las más preciadas facultades que tiene el ser humano por esencia: recordar(la otra es soñar). Además, el olvido es una enfermedad que sólo nos lleva a ejecutar errores ya cometidos.
No podemos permitir que la muerte se robe nuestros recuerdos, y mucho menos nuestros sueños. Así, dispuestos a recordar, permitámonos seguir soñando. No dejemos que esta muerte acabe con lo que hemos construido, sino que, por el contrario, esforcémonos por lograr que a nuestros sueños – ¡vaya trillada, pero hermosa palabra!- no los mate ni la propia muerte.
Ana Cristina Henao

ESTE FUE EL ESCRITO QUE LE ENTREGAMOS A CRISTINA LA MAMA DE JUAN....
AQUI ESTAMOS Y SEGUIREMOS LUCHANDO POR LO QUE QUEREMOS.....
Familia Villamil Padilla:
A pesar de que no los conocimos en persona antes, sabíamos de ustedes por lo que hablaba Juan, y por ello sabemos que son unos seres humanos espectaculares por eso, queremos hoy no solo darles las gracias por haber dado vida y formado a un ser como Juan Rodrigo sino también acompañarlos en su dolor. Dolor que no se compara al de ninguno de los que podamos llegar a sentir nostalgia por la partida de un amigo y compañero como lo fue Juan, lo cual no niega que tengamos algo en común; un recuerdo.
Hace poco empezamos –unos un poco antes que otros- a conocer a Juan Rodrigo, pero no nos hizo falta mucho tiempo para darnos cuenta de todo lo que valía y por eso podemos asegurarles que en cada uno de nosotros dejo esa esperanza, esa energía luchadora por la libertad y la felicidad que lo caracterizaba en todo momento. Juan se convirtió en un hombre tan verraco que no necesitaba gritar para hacerse escuchar porque sus palabras se quedaban retumbando en nuestros oídos por largas horas. Mil felicitaciones por tener un hijo y un hermano así y esperamos que nunca olviden que estaremos siempre recordándolo.
Esta lucha en la que nos encaminamos cuando le apostamos a generar una mutación de nuestra educación para volvernos a enamorar del Derecho, no la dejaremos a un lado y les estaremos contando todo lo que hagamos en torno a ello. Tratando de hacerlo de la forma en que Juan quería, no es fácil pero tomaremos esta vez a la muerte como un impulso para seguir en este proceso de construcción y no dejaremos que las cosas paren aquí.
Una y mil veces, que Dios les de las fuerzas para poder recordar a Juan y no sentir nostalgia porque él estará lejos de los mortales. Estamos seguros de que Juan estará observándolos y cuidándolos.
Cuentan con nosotros como grupo del Foro “Construyendo el Derecho; soñando y estudiándolo” y con todos los que nos encaminamos por esta lucha.
Marzo 20 de 2008.
Ana Cristina Henao, Julián González, Daniel López, Andrés López, María Cristina Hernández, Camila Mariño, Ana María Mondragón, Catalina Rivera, Carolina Moreno López.
AQUI ESTAMOS Y SEGUIREMOS LUCHANDO POR LO QUE QUEREMOS.....
Familia Villamil Padilla:
A pesar de que no los conocimos en persona antes, sabíamos de ustedes por lo que hablaba Juan, y por ello sabemos que son unos seres humanos espectaculares por eso, queremos hoy no solo darles las gracias por haber dado vida y formado a un ser como Juan Rodrigo sino también acompañarlos en su dolor. Dolor que no se compara al de ninguno de los que podamos llegar a sentir nostalgia por la partida de un amigo y compañero como lo fue Juan, lo cual no niega que tengamos algo en común; un recuerdo.
Hace poco empezamos –unos un poco antes que otros- a conocer a Juan Rodrigo, pero no nos hizo falta mucho tiempo para darnos cuenta de todo lo que valía y por eso podemos asegurarles que en cada uno de nosotros dejo esa esperanza, esa energía luchadora por la libertad y la felicidad que lo caracterizaba en todo momento. Juan se convirtió en un hombre tan verraco que no necesitaba gritar para hacerse escuchar porque sus palabras se quedaban retumbando en nuestros oídos por largas horas. Mil felicitaciones por tener un hijo y un hermano así y esperamos que nunca olviden que estaremos siempre recordándolo.
Esta lucha en la que nos encaminamos cuando le apostamos a generar una mutación de nuestra educación para volvernos a enamorar del Derecho, no la dejaremos a un lado y les estaremos contando todo lo que hagamos en torno a ello. Tratando de hacerlo de la forma en que Juan quería, no es fácil pero tomaremos esta vez a la muerte como un impulso para seguir en este proceso de construcción y no dejaremos que las cosas paren aquí.
Una y mil veces, que Dios les de las fuerzas para poder recordar a Juan y no sentir nostalgia porque él estará lejos de los mortales. Estamos seguros de que Juan estará observándolos y cuidándolos.
Cuentan con nosotros como grupo del Foro “Construyendo el Derecho; soñando y estudiándolo” y con todos los que nos encaminamos por esta lucha.
Marzo 20 de 2008.
Ana Cristina Henao, Julián González, Daniel López, Andrés López, María Cristina Hernández, Camila Mariño, Ana María Mondragón, Catalina Rivera, Carolina Moreno López.
miércoles, 19 de marzo de 2008
ESTAMOS DE LUTO!!!!!!!!
...Por los que conocieron a Juan Rodrigo....
Ya nos dejo... por una vuelta loca de la vida, porque así tenía que pasar, por la misma razón por la cual no entendemos por qué nacemos....
solo quiero que puedan dedicar un momento a pensar en qué hizo este gran hombre por cada uno de nosotros...y no hablo de algo heróico y único... porque finalmente estaba en este camino con nosotros... haciendonos ver que el mundo no es tan plano como lo pensamos y que debemos aprovechar la diferencia que hay en cada uno de nosotros para construir... porque debemos contruir y hacer de cada uno de nosotros sujetos planos que sirvan a la sociedad y que dejen de ser simples muñecos de trapo...
Por Juan, por su fuerza y por el ánimo de libertad.
Ya nos dejo... por una vuelta loca de la vida, porque así tenía que pasar, por la misma razón por la cual no entendemos por qué nacemos....
solo quiero que puedan dedicar un momento a pensar en qué hizo este gran hombre por cada uno de nosotros...y no hablo de algo heróico y único... porque finalmente estaba en este camino con nosotros... haciendonos ver que el mundo no es tan plano como lo pensamos y que debemos aprovechar la diferencia que hay en cada uno de nosotros para construir... porque debemos contruir y hacer de cada uno de nosotros sujetos planos que sirvan a la sociedad y que dejen de ser simples muñecos de trapo...
Por Juan, por su fuerza y por el ánimo de libertad.
miércoles, 12 de marzo de 2008
Carta al concejo
Esta es la carta que en teoría va para el consejo de la facultad, me gustaría que le hicieran los apuntes y correciones pertinentes si lo encuentran apropiado. Si quieren dejen las correciones en la sección de comentarios.
Bogotá, ___ de _______ de 2008.
Respetados profesores del consejo de la facultad.
Por medio de esta, queremos extenderles ante todo un saludo cariñoso y lleno de gratitud no solo por los años de trabajo y esfuerzo que sabemos han costado nuestro aprendizaje, sino por proporcionarnos la oportunidad de poder crear, entre todos, una facultad en comunidad donde el diálogo entre seres humanos de iguales dignidades pueda ser posible. Nos referimos claro, al espacio que han otorgado con el foro de educación legal, donde muchas cosas se han dicho, pero donde muchas otras quedan aún por decir, quisiéramos pensar, para futuras oportunidades.
En esta ocasión nos acercamos para respetuosamente proponer una manera de diálogo entre Ustedes, el estamento de mayor importancia en la Facultad y nosotros, sus estudiantes. La propuesta podría resultar a la vez sencilla y difícil, pero sabemos que este diálogo de entendimiento que se inició el Febrero pasado habrá que adaptar tanto los deseos de los que aprendemos como las voluntades de los que enseñan.
Quisiéramos entonces proponer que las actas que se levantan con ocasión de los concejos de facultad tengan una difusión amplia, pública y suficiente. Los métodos pueden variar según la conveniencia así lo aconseje. Podría ser una posibilidad un medio impreso que se entregase por medio de los representantes de curso a sus compañeros estudiantes o bien de manera masiva a través de los correos electrónicos dispuestos por la Universidad.
El fin de esta propuesta es generalizar el conocimiento de las decisiones que se toman en nuestra facultad que afectan al estudiantado de manera directa, ya que sin duda alguna, las políticas y direcciones que se tomen en el concejo son la realidad que afecta diariamente a los que por este claustro circulamos, tratando de saciar nuestra sed por conocimiento. Es fin a su vez de esta propuesta convertir a los estudiantes en una fuerza de conocimiento, conciente de la facultad en la que estudia, conciente sin duda, de los principios que gobiernan y son la razón de ser de la ciencia que aquí se cultiva, la equidad, la justicia, la coherencia y el respeto mutuo.
Sometemos pues, nuestras esperanzas a Ustedes, quienes se han tomado el tiempo de escuchar esta opinión, una voz que esperamos, pueda ser el camino a la construcción de una mejor facultad, una facultad con lugar para todas las opiniones, una facultad donde los debates sean públicos y llenos de argumentos de calidad, una facultad, en suma, como la que ustedes y nosotros deseamos fervientemente hasta el límite de nuestros sueños y esperanzas.
Respetuosamente.
Sus estudiantes.
Bogotá, ___ de _______ de 2008.
Respetados profesores del consejo de la facultad.
Por medio de esta, queremos extenderles ante todo un saludo cariñoso y lleno de gratitud no solo por los años de trabajo y esfuerzo que sabemos han costado nuestro aprendizaje, sino por proporcionarnos la oportunidad de poder crear, entre todos, una facultad en comunidad donde el diálogo entre seres humanos de iguales dignidades pueda ser posible. Nos referimos claro, al espacio que han otorgado con el foro de educación legal, donde muchas cosas se han dicho, pero donde muchas otras quedan aún por decir, quisiéramos pensar, para futuras oportunidades.
En esta ocasión nos acercamos para respetuosamente proponer una manera de diálogo entre Ustedes, el estamento de mayor importancia en la Facultad y nosotros, sus estudiantes. La propuesta podría resultar a la vez sencilla y difícil, pero sabemos que este diálogo de entendimiento que se inició el Febrero pasado habrá que adaptar tanto los deseos de los que aprendemos como las voluntades de los que enseñan.
Quisiéramos entonces proponer que las actas que se levantan con ocasión de los concejos de facultad tengan una difusión amplia, pública y suficiente. Los métodos pueden variar según la conveniencia así lo aconseje. Podría ser una posibilidad un medio impreso que se entregase por medio de los representantes de curso a sus compañeros estudiantes o bien de manera masiva a través de los correos electrónicos dispuestos por la Universidad.
El fin de esta propuesta es generalizar el conocimiento de las decisiones que se toman en nuestra facultad que afectan al estudiantado de manera directa, ya que sin duda alguna, las políticas y direcciones que se tomen en el concejo son la realidad que afecta diariamente a los que por este claustro circulamos, tratando de saciar nuestra sed por conocimiento. Es fin a su vez de esta propuesta convertir a los estudiantes en una fuerza de conocimiento, conciente de la facultad en la que estudia, conciente sin duda, de los principios que gobiernan y son la razón de ser de la ciencia que aquí se cultiva, la equidad, la justicia, la coherencia y el respeto mutuo.
Sometemos pues, nuestras esperanzas a Ustedes, quienes se han tomado el tiempo de escuchar esta opinión, una voz que esperamos, pueda ser el camino a la construcción de una mejor facultad, una facultad con lugar para todas las opiniones, una facultad donde los debates sean públicos y llenos de argumentos de calidad, una facultad, en suma, como la que ustedes y nosotros deseamos fervientemente hasta el límite de nuestros sueños y esperanzas.
Respetuosamente.
Sus estudiantes.
jueves, 6 de marzo de 2008
Que los sueños nunca se apaguen ... Nostalgia colectiva, susurro de heroes caidos que entre taciturnos mensajes, solo esperan la caida de los bajos suspiros, para derrocar los supuestos lideres, y lograr que la mision se cumpla, y de cumplirse, no gritar por la victoria, sino callar para escuchar las voces de la memoria guia y brujula para la busqueda de indentidad y espiritu.
(Juan Rodrigo Villamanil)
miércoles, 5 de marzo de 2008
ESTO ES PARTE DE LO QUE PASA POR MI CABEZA AL DESEAR UNA MUTACION
Javerianos, Maestros, Profesores, cuasi-abogados, estudiantes, colombianos, … no creen que a veces nos pensamos y nos vemos como máquinas incluidas en un sistema totalmente definido, como si la obra de teatro que estamos interpretando ya estuviera montada antes de que llegaran los actores?
El problema –a mi modo de ver- es que ese mismo sistema que nos dio el lugar del cual gozamos -por medio de un proceso totalmente ajeno a nosotros- neutraliza nuestras pasiones para darle paso a reacciones predeterminadas, lo cual niega de plano la posibilidad de que todo empiece a funcionar diferente y que sea posible una mutación.
Por otro lado, la responsabilidadP por no actuar y dejar que todo pase como viene pasando es de nosotros, pues sabemos qué debemos hacer, pero no sabemos cómo. Y no es solo la indiferencia que nos lleva a no actuar sino las improntas que nos dejan algunas figuras que representan autoridad en nuestro discurso, al afirmarnos que debido a la poca experiencia y a que aún estamos “vírgenes” laboralmente, tenemos mucho corazón y que al llegar a ejercer, el mismo sistema nos “mostrará” su modo de operar, el cual tendremos que seguir sin criticar y así, incluso antes de enfrentarnos al ejercicio profesional nos castramos y cortamos toda posibilidad de cambio a través del derecho. Reduciendo así, nuestras pasiones y sueños a imaginarios que poco a poco se borraran al ver que nada podemos hacer para lograr obtenerlos. Y esos sueños de ayer, serán cambiados únicamente por las posibilidades reales de hoy.
Esta neutralización –en el transcurso de nuestra educación universitaria- nos lleva a preguntarnos si somos capaces de arriesgar lo que creemos seguro hacia futuro para construir una verdad en donde nuestras pasiones tengan su desfogue. Un lugar donde seamos tan realistas que podamos soñar con lo imposible. Sin olvidar la búsqueda –como miembros de un estado de derecho- del bien común, pero empezando por encontrarnos a nosotros, para luego poder llegar a ser en colectivo.
Así, llegamos a una facultad de derecho esperando algo, proponiéndonos unas metas, las cuales dependerán de la forma en que imaginemos nuestra educación, forma que puede coincidir con la mostrada en escritos como la misión, el proyecto educativo de nuestra universidad o en un de las tantas afirmaciones -presentes en la página de internet- de por qué estudiar derecho en nuestra facultad.
En cuanto a estos escritos, sé que la mayoría de nosotros –incluso los que estamos en los semestres más avanzados- no los conocemos porque entramos a esta universidad por otros móviles o simplemente porque la indiferencia o el renombre llevó a que nos aceptáramos como sujetos vacíos sin un norte aunque sí con la certeza de que no importaría usar cualquier medio para lograr “algo” y así llenarnos de significado en el camino, sin darle mucha importancia a la formación pues, eso sería un elemento que vendría por añadidura.
Pero no por esto, quiero eclipsar el significado que tienen –o deben tener- estos textos para los estudiantes y en general para toda la comunidad universitaria, pues es allí donde es nombrado el estudiante, siendo antes de esto, solo un significante vacío innombrado. Al aparecer en el discurso se le esta dando un papel, de ahí que es primordial que la identidad del estudiante venga en construcción y se vea afectada por estos escritos. Pues al llevar a la practica preceptos como “ser más, para servir mejor”, el sujeto va a buscar y transmitir el saber como un medio de emancipación mediante el disfrute colectivo de una sociedad más humana, más respetuosa de los derechos y menos vulnerable a los abusos del poder, lo que logrará que la formación perdure en nosotros mismos y sea esto evidente en el cómo enseñamos y aprendemos el derecho.
Por este afán del sujeto de obtener significado, a lo largo de toda nuestra vida somos un proyecto en construcción y la identidad del yo se define a través del otro pero nunca para el otro. Lo que pretendo señalar es que no olvidemos qué nos llevó a estudiar lo que estudiamos, qué se esconde detrás de llegar a obtener un diploma que diga que somos abogados de la Pontificia Universidad Javeriana.
Porque la fuerza no la trae la institución, la fuerza la trae la decisión de ser alguien, de tener identidad como hombre, mujer u homosexual abogado, como lo afirma el proyecto educativo “Cada persona es agente de su propia formación. Esta favorece tanto el crecimiento hacia la autonomía del individuo como su ubicación en la sociedad, para que pueda asumir la herencia de las generaciones anteriores y para que sea capaz, ante los desafíos del futuro, de tomar decisiones responsables a nivel personal, religioso, científico, cultural y político”. Así, La visibilidad de los estudiantes obliga a la educación a acomodarse a lo que se demande y no pretender que el estudiante se conforme con lo que la educación le ofrece.
Porque para eso nos estamos educando, para decidir no solo qué vamos a hacer sino cómo lo vamos a hacer y así, darle un camino a nuestras pasiones, logrando articularnos en los diferentes discursos que nos nombran como protagonistas o agentes importantes en la realidad colombiana. Simultáneamente debemos llenarnos de razones y dar paso a la construcción sin necesidad de duplicar lo dejado por otros.
Por eso, nuestra profesión no la construye una corbata o un lujoso estilo de vida, porque no podríamos llamarnos abogados sino somos seres que aceptamos una constante construcción y que se dejan afectar por los diferentes objetos y sujetos conocidos, por ello necesitamos de otras disciplinas –como la psicología, la filosofía, la historia, la antropología, etc.- para poder llegar a la verdad, nuestra verdad.
Sin negar que hacemos parte de un sistema organizado previamente, en el cual estamos perfectamente articulados de forma que nuestras necesidades se manifiesten de un modo que el mismo sistema las cubra, pero no con ello debemos cerrarnos y olvidar que lo que necesitamos es pensar al derecho de tal manera que sea posible entrar en él, criticarlo, sin rechazarlo completamente, y manipularlo sin dejarse llevar por su sistema de pensamiento y funcionamiento. En cuanto hagamos esto, seremos agentes útiles pues podremos realmente ayudar a solucionar los diferentes problemas y desequilibrios que como abogados –y humanos- se nos planteen dentro y fuera del litigio, haciendo del derecho aprehendido un puente que une un concepto de la realidad con una alternativa imaginada, siendo ese campo de acción nuestro secreto y yendo más allá del tecnicismo en el que han querido encajar nuestra profesión, para negar nuestra naturaleza y encajar en el derecho.
Mi invitación es a que nos aferremos a creer, primero en el ser humano y luego en nuestras pasiones para dar origen y sentido a lo que a veces no parece tenerlo, para que a lo largo de nuestro ejercicio como abogado no se nos olvide ser humanos y así, terminemos siendo profesionales, infelices, insatisfechos y mediocres.
El problema –a mi modo de ver- es que ese mismo sistema que nos dio el lugar del cual gozamos -por medio de un proceso totalmente ajeno a nosotros- neutraliza nuestras pasiones para darle paso a reacciones predeterminadas, lo cual niega de plano la posibilidad de que todo empiece a funcionar diferente y que sea posible una mutación.
Por otro lado, la responsabilidadP por no actuar y dejar que todo pase como viene pasando es de nosotros, pues sabemos qué debemos hacer, pero no sabemos cómo. Y no es solo la indiferencia que nos lleva a no actuar sino las improntas que nos dejan algunas figuras que representan autoridad en nuestro discurso, al afirmarnos que debido a la poca experiencia y a que aún estamos “vírgenes” laboralmente, tenemos mucho corazón y que al llegar a ejercer, el mismo sistema nos “mostrará” su modo de operar, el cual tendremos que seguir sin criticar y así, incluso antes de enfrentarnos al ejercicio profesional nos castramos y cortamos toda posibilidad de cambio a través del derecho. Reduciendo así, nuestras pasiones y sueños a imaginarios que poco a poco se borraran al ver que nada podemos hacer para lograr obtenerlos. Y esos sueños de ayer, serán cambiados únicamente por las posibilidades reales de hoy.
Esta neutralización –en el transcurso de nuestra educación universitaria- nos lleva a preguntarnos si somos capaces de arriesgar lo que creemos seguro hacia futuro para construir una verdad en donde nuestras pasiones tengan su desfogue. Un lugar donde seamos tan realistas que podamos soñar con lo imposible. Sin olvidar la búsqueda –como miembros de un estado de derecho- del bien común, pero empezando por encontrarnos a nosotros, para luego poder llegar a ser en colectivo.
Así, llegamos a una facultad de derecho esperando algo, proponiéndonos unas metas, las cuales dependerán de la forma en que imaginemos nuestra educación, forma que puede coincidir con la mostrada en escritos como la misión, el proyecto educativo de nuestra universidad o en un de las tantas afirmaciones -presentes en la página de internet- de por qué estudiar derecho en nuestra facultad.
En cuanto a estos escritos, sé que la mayoría de nosotros –incluso los que estamos en los semestres más avanzados- no los conocemos porque entramos a esta universidad por otros móviles o simplemente porque la indiferencia o el renombre llevó a que nos aceptáramos como sujetos vacíos sin un norte aunque sí con la certeza de que no importaría usar cualquier medio para lograr “algo” y así llenarnos de significado en el camino, sin darle mucha importancia a la formación pues, eso sería un elemento que vendría por añadidura.
Pero no por esto, quiero eclipsar el significado que tienen –o deben tener- estos textos para los estudiantes y en general para toda la comunidad universitaria, pues es allí donde es nombrado el estudiante, siendo antes de esto, solo un significante vacío innombrado. Al aparecer en el discurso se le esta dando un papel, de ahí que es primordial que la identidad del estudiante venga en construcción y se vea afectada por estos escritos. Pues al llevar a la practica preceptos como “ser más, para servir mejor”, el sujeto va a buscar y transmitir el saber como un medio de emancipación mediante el disfrute colectivo de una sociedad más humana, más respetuosa de los derechos y menos vulnerable a los abusos del poder, lo que logrará que la formación perdure en nosotros mismos y sea esto evidente en el cómo enseñamos y aprendemos el derecho.
Por este afán del sujeto de obtener significado, a lo largo de toda nuestra vida somos un proyecto en construcción y la identidad del yo se define a través del otro pero nunca para el otro. Lo que pretendo señalar es que no olvidemos qué nos llevó a estudiar lo que estudiamos, qué se esconde detrás de llegar a obtener un diploma que diga que somos abogados de la Pontificia Universidad Javeriana.
Porque la fuerza no la trae la institución, la fuerza la trae la decisión de ser alguien, de tener identidad como hombre, mujer u homosexual abogado, como lo afirma el proyecto educativo “Cada persona es agente de su propia formación. Esta favorece tanto el crecimiento hacia la autonomía del individuo como su ubicación en la sociedad, para que pueda asumir la herencia de las generaciones anteriores y para que sea capaz, ante los desafíos del futuro, de tomar decisiones responsables a nivel personal, religioso, científico, cultural y político”. Así, La visibilidad de los estudiantes obliga a la educación a acomodarse a lo que se demande y no pretender que el estudiante se conforme con lo que la educación le ofrece.
Porque para eso nos estamos educando, para decidir no solo qué vamos a hacer sino cómo lo vamos a hacer y así, darle un camino a nuestras pasiones, logrando articularnos en los diferentes discursos que nos nombran como protagonistas o agentes importantes en la realidad colombiana. Simultáneamente debemos llenarnos de razones y dar paso a la construcción sin necesidad de duplicar lo dejado por otros.
Por eso, nuestra profesión no la construye una corbata o un lujoso estilo de vida, porque no podríamos llamarnos abogados sino somos seres que aceptamos una constante construcción y que se dejan afectar por los diferentes objetos y sujetos conocidos, por ello necesitamos de otras disciplinas –como la psicología, la filosofía, la historia, la antropología, etc.- para poder llegar a la verdad, nuestra verdad.
Sin negar que hacemos parte de un sistema organizado previamente, en el cual estamos perfectamente articulados de forma que nuestras necesidades se manifiesten de un modo que el mismo sistema las cubra, pero no con ello debemos cerrarnos y olvidar que lo que necesitamos es pensar al derecho de tal manera que sea posible entrar en él, criticarlo, sin rechazarlo completamente, y manipularlo sin dejarse llevar por su sistema de pensamiento y funcionamiento. En cuanto hagamos esto, seremos agentes útiles pues podremos realmente ayudar a solucionar los diferentes problemas y desequilibrios que como abogados –y humanos- se nos planteen dentro y fuera del litigio, haciendo del derecho aprehendido un puente que une un concepto de la realidad con una alternativa imaginada, siendo ese campo de acción nuestro secreto y yendo más allá del tecnicismo en el que han querido encajar nuestra profesión, para negar nuestra naturaleza y encajar en el derecho.
Mi invitación es a que nos aferremos a creer, primero en el ser humano y luego en nuestras pasiones para dar origen y sentido a lo que a veces no parece tenerlo, para que a lo largo de nuestro ejercicio como abogado no se nos olvide ser humanos y así, terminemos siendo profesionales, infelices, insatisfechos y mediocres.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)